¿A qué nos referimos cuando hablamos de Discapacidad?

Primero es necesario destacar que ante todo concepto hablamos de una persona, niño, niña, joven, adulto o adulta. El diagnóstico no define a la persona. Entonces, ¿cuáles son los aspectos que nos diferencian realmente? Nos diferencian nuestros deseos, elecciones y vivencias a lo largo de la vida. Creemos vital poner el foco en las necesidades individuales para crear apoyos necesarios para la inclusión.

A su vez, consideramos importante diferenciar entre lo que significa hacer las cosas de forma impuesta a no poder hacerlas. Si nos centramos en las necesidades y adaptamos nuevas alternativas será posible realizarlo.

Creemos firmemente que es necesario poner la mirada en las necesidades individuales para generar nuevas y diversas estrategias, como también adaptaciones.

Existen tantas alternativas como posibilidades:

• Anticipar las tareas

• Ofrecer apoyos necesarios (visuales, sonoros, auditivos, dispositivos, persona intermediaria)

• Tener en cuenta intereses/deseos

• Incentivar/estimular a la hora de trabajar generando confianza

• Reforzar la comunicación: códigos vocales/gestuales/comunicadores

• Ofrecer objetos o medios que faciliten el acceso a la autonomía

• Implementar la imitación, referentes, ejemplos

• Poner en duda acciones, para crear conciencia del error

• Sustituir preguntas directas por preguntas con alternativas u opciones

• Evitar la sobreprotección

• Poner limites

¿Qué hacer cuando aparecen momentos de frustración, enojo, berrinches y/o llanto?

Primero entender que es parte del proceso. Es la forma de manifestar sus emociones. Transitar la frustración necesaria para crecer y avanzar. Por lo tanto, sugerimos ser flexibles y proponer cambiar de ambiente, actividad o propuesta. Acompañar con explicaciones desde la calma, con claridad y firmeza.

TIPS PARA EL HOGAR

– Organizar días y horarios con rutinas, actividades y responsabilidades

– Repartir y designar tareas compartidas

– Definir y cambiar de espacios

– Realizar propuestas desde la negociación y el intercambio con entusiasmo

– Ser flexibles frente a la frustración

– Poner límites desde el amor generando oportunidades para generar logros personales

Por último nos resulta importante aclarar que la INCLUSIÓN implica:

– Recibir trato justo de otras personas. Hacer que los productos, las comunicaciones y el ambiente físico puedan ser utilizados por la mayor cantidad de personas posible (diseño universal).

– Modificar procedimientos o sistemas mediante adaptaciones razonables, para permitir que una persona con discapacidad los aproveche al máximo posible.

– Eliminar la creencia de que las personas con discapacidades no están sanas o son menos capaces de hacer cosas.

– No subestimarlos. Pueden hacer cosas por sí solos, por lo que no hay que estar permanentemente ayudándolos en todo.

– No ayudar sin antes proponerlo. Hay que hacer una pregunta directa y de forma natural, esperar la respuesta y si ésta es afirmativa, realizarlo de forma discreta. Sin sobreproteger o incluso presumiendo de hacer esa ayuda.

– Comportarse con naturalidad en las relaciones personales. Esto implica no generar incomodidades en el trato o decir expresiones compasivas.

– No dirigirse a sus acompañantes a no ser que la persona no pueda comunicarse por sí sola.