El envejecimiento es un proceso biológico, la vejez en cambio es mucho más. Incluye otras variables como la clase, el género, la cultura y la etnia.  

La vejez es una construcción social, que se encarna. Por mucho tiempo las personas mayores fueron las más valoradas socialmente, siendo quienes poseían información valiosa, y los niños/jóvenes tenían menor relevancia. En la actualidad observamos cómo esto fue modificándose, la experiencia que podían ofrecer los mayores dejó de tener tanta importancia, ya que todo cambia constantemente, valorándose ahora la adaptación, flexibilidad y creación de nuevos modos.

Envejecer implica afrontar cambios. La identidad sufre transformaciones determinantes a nivel social, psicológico, biológico y narrativo. Cada persona lo vive a su manera, con impactos diferentes. Estos cambios requieren de un trabajo de elaboración psíquica, donde se asimilen las transformaciones sucedidas. Se generan así nuevas representaciones de la identidad, donde uno está constantemente redefiniéndose, resignificándose y encontrando nuevos sentidos.

El viejismo es el conjunto de prejuicios, estereotipos y discriminaciones que se aplican a las personas mayores exclusivamente en función de su edad. Uno de los mayores prejuicios es igualar vejez y enfermedad. La gerontología cuestiona estas falsas creencias, y permite comprender la salud desde el punto de la capacidad para desarrollar las actividades diarias, y procesos de cambio, permitiendo la satisfacción personal. Otros prejuicios frecuentes son pensar que las personas mayores implican una carga para la sociedad, o que tiene actitudes rígidas, y que no tienen vida sexual activa.

Desde nuestra mirada, apuntando a la salud integral de las personas, nos parece importante acompañar para visibilizar el viejismo, ya que ayuda a quienes lo padecen a nombrarlo, cuestionarlo y dejar de naturalizarlo. Uno de los grandes objetivos es acompañarlos en la construcción y fortalecimiento de redes de apoyo más alla del núcleo familiar. Dando lugar a la  resignificación de la amistad y al intercambio intergeneracional, para salir del aislamiento que puede llegar a generar depresiones y afectar la salud psicofísica.

Se envejece según se ha vivido